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Refranes populares con la letra U
Un aire sutil, mata a un hombre y no apaga un candil.
Un apóstol en el cielo y un escribano en el suelo.
Un arreglo tiene el juego para siempre ganar: no jugar.
Un buen libro es un tesoro: cada hoja, un pan de oro.
Un buen pedo puede hacer ruido largo tiempo.
Un carbón ardiente, hace quemar al siguiente.
Un ciego lloraba un día porque espejo quería.
Un clavo saca a otro clavo
Un cuerdo entre locos, ellos se tienen por cuerdos y a él le tienen por loco.
Un dedo no hace mano, pero sí con sus hermanos.
Un garbanzo no hace puchero, pero ayuda a su compañero.
Un grano no hace granero, pero ayuda a su compañero.
Un grano no hace granero, pero ayuda al compañero.
Un loco hace ciento.
Un mal con un bien se apaga.
Un mes antes y otro después de Navidad, es invierno de verdad.
Un sabio y un tonto saben más que un sabio solo.
Un tonto hace reír a ciento, si le dan lugar y tiempo.
Un traguillo de vino de cuando en cuando, y vamos tirando.
Una buena cabra, una buena mula y una buena mujer, son muy malas bestia las tres.
Una cosa rara sucedió en la muerte de mi tía: que un rato antes de morir aún vivía.
Una en el papo y otra en el saco.
Una escoba ataviada, por dama hermosa pasa.
Una golondrina no hace verano, ni una sola virtud bienaventurado.
Una golondrina no hace verano.
UNA hora duerme el gallo, DOS el caballo, TRES el santo, CUATRO el que no es tanto, CINCO el capuchino, SEIS el peregrino, SIETE el caminante,OCHO el estudiante, NUEVE el caballero, DIEZ el pordiosero, ONCE el muchacho y DOCE el borracho
Una hora duerme el gallo, dos el caballo, tres el santo, cuatro el que no lo es tanto.
Una manzana podrida daña el barril completo.
Una obra acabada, otra empezada.
Una pena quita a otra pena.
Una retirada a tiempo es una victoria.
Una sola araña, cien moscas apaña.
Una sonrisa no cuesta nada pero vale mucho.
Una vez al año no hace daño.
Una vez que la vieja quiso comer carnero, habían ahorcado al carnicero.
Uno a ganar y cinco a gastar; milagrito será ahorrar.
Uno a meter y otro a sacar, el primero ha de llorar.
Uno coge la liebre en el prado, y otro la coge en el plato.
Uno madrugó y veinte duros encontró, pero más madrugó el que los perdió.
Uno suele valer por muchos, y muchos por ninguno.
Uno y ninguno, en total suman uno.
Unos nacen con estrellas y otros estrellados.
Unos nacieron para moler y otros para ser molidos.
Unos por otros, la casa sin barrer.
Unos saben lo que hacen y otros hacen lo que saben.
Unos tener tanto y otros tan poco, propio es de este mundo loco.
Uva a uva llenaba la vieja la cuba.
Uva moscatel, no llega al tonel.