EL BESO

EL BESO
El beso es tal vez la forma más sensual del juego amoroso. Los besos varían en ritmo, intensidad, sentimiento y deseo. Lo cierto es que los besos procuran gran placer a sus ejecutantes.

No existe una manera correcta de besar, pero lo que sí debes saber es cómo acercarte, qué hacer durante el beso y cómo terminarlo.
Hay diversas formas de dar un beso como bocas existan, porque besar involucra todos los sentidos generando reacciones que bien pueden despertar la pasión o provocar la repulsión por la otra persona. Para quien tome la iniciativa de besar a otra persona, los besos que seguramente causarán más rechazo que gusto a su pareja son:

Un beso precipitado: donde literalmente no deja ni respirar a la otra persona, ocasionado por un malentendido porque se piensa que la otra persona está lista para una relación sexual, cuando ni siquiera le ha cruzado por la mente. Este tipo de beso puede ser tomado como un insulto y aprovechamiento de la otra persona, puede ir seguido de una gran bofetada.

Un beso con el mínimo de contacto: como si la otra persona fuera a pegarle una enfermedad o le estuviera haciendo un favor en besarla (o). La persona besada pensará que él (la) otro(a) tiene problemas con sus sentimientos y su timidez, o que simplemente es un niño(a) que no sabe besar.

Un beso succionador: que generalmente ocurre cuando un hombre no puede controlar sus instintos. La otra persona quisiera separarse rápidamente antes de ser tragada por su compañero o perder sus dientes en el intento. Son besos desagradables y pueden quedar pocas o nada de ganas de intentarlo otra vez.

Mientras que los besos que desatan la pasión y que se repiten constantemente de pareja en pareja son:

El beso en los labios: es el más básico y es aquel en donde los labios de dos personas se tocan y se presionan. Mientras se besa en los labios puedes moverlos lentamente hacia atrás y adelante; succionar el labio superior o inferior de tu pareja; balancear la cabeza suavemente hacia atrás y adelante; o dejarte guiar por la otra persona.

El beso largo: puedes iniciarlo besando firme y estrechamente en los labios a tu pareja, no dejando espacio vacío entre ellos. El beso se prolongará hasta que comiences a sentirte un tanto sin aliento, para empezar a respirar por la nariz. Se debe tragar cuando sea necesario sin interrumpir el contacto labial. Mientras besas puedes abrazar y estrechar a la otra persona o combinar el beso largo con un beso a la francesa o de otro tipo.

El beso a la francesa: es muy conocido por casi todos y es cuando con los ojos cerrados, tocas con tu lengua los labios de tu pareja y poco a poco introduce tu lengua dentro de la boca de tu pareja y ella o él responde haciendo lo mismo. Se puede explorar el paladar, así como el interior de las mejillas, los dientes, debajo de la lengua. El principal interés es la lengua de tu pareja a la que debes responder en todos sus movimientos y toques.

El beso de succion: consiste en tomar entre tus labios el labio inferior del otro introduciéndolo en tu boca, mientras la otra persona ejerce un movimiento hacia dentro.

El beso de mordida: es aquel en donde aprisionas entre tus dientes los labios de tu pareja, cuidando de no lastimarla/o.

Cabe recordar que muchas mujeres prefieren un beso dulce y tierno porque les provoca mayor excitación, sin embargo, es importante considerar los distintos cambios que se producen mientras se besan. Puedes empezar con los labios juntos, en un beso tierno y caliente hasta alcanzar cierto grado de excitación. Entonces sigue con besos más intensos, húmedos y prolongados. En esos momentos tu pareja puede estar lista para recibir tu lengua y fundirse en un largo beso. Es importante sentir las reacciones que se producen conforme se besan para entonces aventurarse más sin peligro a ser rechazado.

Si deseas terminar un beso no te retires violentamente porque alarmarás a tu pareja. Cierra lentamente los labios cuando estén todavía en contacto con los de tu pareja y detente. Observa si tu pareja empieza otro beso, si lo hace, entones deberás decidir si continúas o lo interrumpes. Si deseas interrumpirlo entonces mantén los labios cerrados y retírate suavemente. En ese momento abre los ojos y puedes dar un nuevo beso o apartarte.