MISTERIOS OCULTOS (W)

Wilhelm Reich contra los OVNIS
La carrera del pionero analista freudiano Wilhelm Reich fue tan controvertida que su trabajo más polémico, su batalla contra los invasores OVNIS pasó casi inadvertida.

Nacido en Austria en 1897, Reich mostró rápidamente un genio temperamental de la psicología humana, convirtiéndose en freudiano cuando estaba todavía estudiando en la Universidad. En realidad habría sido el sucesor del maestro psicoanalista si no hubiese ido más allá de Freud, con su insistencia en que la líbido liberada, conocida también como orgasmo no inhibido, era una señal inconfundible de salud física y mental. Esta filosofía hizo que su autor fuese pronto expulsado de la Asociación Psicoanalítica Internacional, así como del naciente Partido Comunista.

Reich se retiró a Escandinavia, donde afirmó haber descubierto el «bion», una célula microscópica azul que era la unidad base de toda materia viviente, y el «orgón», la energía organizadora de la vida misma. Después, expulsado de Escandinavia, se estableció definitivamente en una finca de Baine a la que llamó «Orgonón», en honor de su descubrimiento. Desde allí, entabló una guerra contra los OVNIs con su «reventador de nubes», un ingenio encaminado a extraer energía orgón negativa de las nubes.

Reich se había convencido de que los OVNIS eran formas de vida interplanetarias que espiaban su trabajo, y también de que eran acumuladores de lo que llamaba «orgón mortal», que causaba la «desertización» del planeta. Se preguntaba qué ocurriría si enfocaba los tubos huecos de su reventador de nubes contra los OVNIS. Tuvo la respuesta en la noche del 10 de octubre de 1954, cuando una serie de OVNIS rojos y amarillos (los benéficos habrían sido, según Reich, azules) convergieron sobre Orgonón. Reich declaró que apuntando a las nubes con su aparato, aquéllas perdían intensidad y tomaban una acción evasiva.

En su libro sobre el experimento, presenciado por varios colaboradores, Reich observó que: «Esta noche, por primera vez en la Historia del hombre, la guerra lanzada desde el espacio exterior contra la Tierra... ha sido respondido... con resultados positivos».

Pero Reich no viviría para ver su triunfo en aquella guerra. Murió en noviembre de 1957, cuando estaba encerrado en una penitenciaria federal, por haberse negado a dejar de vender cajas de «orgón» que, según afirmaba, podía curar el cáncer.